domingo, 23 de agosto de 2015

Tarta de bautizo con encajes

Qué ganitas tenía de hacer una tarta como esta, en la que te dan la idea principal pero luego te dejan hacer, y además lo que te dejan hacer es algo muy pijo que tenía tanta ilusión por probar. 

Lo que tenía tantas ganas de probar era hacer encajes en fondant, con esos cortadores pequeñitos que hacen las hojitas y los redondeles..... ainss! qué monada!!, pues eso, que en esta tarta me quedé a gusto con tanto encajito que hice, pero lo mejor es que el resultado quedó monísimo y a la mamá de Cloe y a sus invitados les gustó. 

No voy a poner exactamente un paso a paso, pero sí el proceso un poco que seguí para la decoración. 

 Primero hice los elementos que tenían que secarse, así que desde la semana anterior preparé las figuritas que quería poner y por supuesto....
 los zapatitos que hirían de topper en la tarta, sobre la mantita con sus puntillitas.


El encaje de la base de la tarta de arriba y la de abajo, también los preparé unos días antes, ya que la tarta era muy grande y no quería agobiarme el último día, además la otra parte de Secretcupcakes estaba con mucho trabajo y no pudo echarme una mano, bueno.... y que a ella tampoco le gustan estas pijerías, pá qué nos vamos a engañar...

Los dos pisos de la tarta de abajo, los llevamos montados hasta el lugar de la celebración, el último no, porque a pesar de que la tarta era muy estable, me daba miedo con el movimiento del coche que se viniera abajo, así que decidí acabar de montarla en el lugar del bautizo.

 También habia que preparar los cuadrados con el nombre de Cloe. Son de bizcocho, y en esta ocasión quise probar una técnica nueva para mi. En lugar de cubrir el cuadradito de una vez, que luego es muy dificil sacarle las esquinas a esto tan pequeño, forré cada lado y puse las tiras de las uniones. Mi abuelo, que era un buen carpintero y un manitas para todo, estaría orgulloso de mi, de cómo hice que coincidieran esas esquinas, eso sí, no las vuelvo a hacer ni borracha, porque el trabajo que da es demasiado. Busaré otra forma que quede igual de resultona y de menos curro.
 Al final, además, me dio la impersión de que quedaron demasiado, grandes, siempre pienso que es poco, la próxima vez, más pequeños. 

También preparé las cajitas para presentar las minicupcakes. En este caso tuneé unas cajitas de fresas forrandolas de goma eva y pegandoles unos apliques de cositas de bebés.

 Dentro de las cajas, estaban unas bandejitas con las cavidades para colocar las cupcakes.
Las cupcakes estaban rellenas de mermelada de fresas y con buttercream de fresas. Por supuesto, los adornos de fondant, con motivos infantiles.

 Y así quedó la tarta al final completamente montada.
 Con los cuadraditos con el nombre de Cloe en la mesa, porque no quería que taparan los encajes que tanto me había costado y gustado hacer.

 Con las cupcakes a los lados, la verdad es que quedé muy contenta con el resultado. Y la mamá también, así que no se puede pedir más.
 El bizcocho de la tarta era de vainilla, con relleno de chocolate y buttercream de vainilla, con mermelada de papaya y naranja que hice este año en las vacaciones en La Palma, que mi suegra tenía un montón de papayas y ya no sabía que hacer con ellas, y como me había llevado mi thermomix, pues en un momentito, un montón de mermelada.




No hay comentarios:

Publicar un comentario