Manuel nos pidió una tarta para su mujer que representara aquello que más le gusta a ella, viajar (igualito que a mi, jijijij), tenía que tener un avión y pegatinas de los sitios que más le gustan, así que nos pusimos manos a la obra.
Así que aquí está su avioncito, que está aguantado en el aire con una cruz de cartón debajo.
Y las etiquetas de París y Nueva York.
Los detalles de las hebillas, el nombre de la propietaria.
Y el asa. Recientemente hemos descubierto el pegamento comestible. Lo hicimos en casa y la verdad es que es un invento. Endurece mucho más rápido y aguanta mejor.
La tarta es de bizcocho de vainilla, humedecido con almíbar de limoncello, rellena de lemond curd y cubierta de buttercream de limón.
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